¿Influyen los métodos de pago en lo que somos capaces de ahorrar?
Las tarjetas bancarias son un método de pago que utilizamos cada vez más en la actualidad. Empezamos a dejar atrás el efectivo y pasamos a pagar todo con la tarjeta o incluso con nuestro teléfono móvil, pero… ¿afecta esto a nuestro ahorro?
Las tarjetas bancarias son un método de pago que utilizamos cada vez más en la actualidad. Empezamos a dejar atrás el efectivo y pasamos a pagar todo con la tarjeta o incluso con nuestro teléfono móvil, pero… ¿afecta esto a nuestro ahorro?
Todos llevamos siempre en nuestra cartera una tarjeta de crédito, una tarjeta de débito y algo de efectivo, pero dependiendo de nuestras preferencias, elegimos pagar con un medio de pago u otro. Normalmente porque nos resulta más cómodo, pero deberíamos empezar a valorar qué opción es mejor para nuestro ahorro personal.
Cuando hablamos de ahorrar no es lo mismo pagar de una forma que de otra, ya que dependiendo del método de pago que utilicemos tendremos un mayor o menor control de nuestros gastos.
Al final todos queremos ahorrar y quizás te parezca algo insignificante, pero puede que al utilizar una de estas formas de pago estés gastando más de lo que deberías sin darte cuenta.
En este artículo queremos analizar las ventajas e inconvenientes de ambos métodos de pago respecto a nuestros objetivos de ahorro, ¡empezamos!
¿Qué pasa cuando pagamos con tarjeta?
Pagar con tarjeta resulta cada vez más cómodo para la mayoría de la población, pero lo primero que debemos tener claro es la diferencia entre las dos tarjetas más conocidas, la de crédito y la de débito:
La tarjeta de crédito
Este tipo de tarjeta nos permite tomar dinero prestado del banco, es decir, puedes gastar más del dinero que tienes en la tarjeta y aplazar el cobro hasta el siguiente mes.
Otra opción que te aporta este tipo de tarjeta es la de financiación, puedes optar por realizar el pago a plazos, pero tendrás que pagar intereses a cambio.
No tener el control sobre tu tarjeta de crédito puede hacer que sumes deuda tras deuda y traerte graves problemas económicos. Es una herramienta útil pero peligrosa si hacemos un uso inadecuado de esta.
La tarjeta de débito
Este tipo de tarjeta nos permite sacar dinero directamente de nuestra cuenta y pagar con esta cada vez que realizamos una compra, pero a diferencia de la tarjeta de crédito, no puedes excederte del dinero que tienes en tu cuenta.
Pagar con cualquiera de estas dos tarjetas nos aporta una gran ventaja: tendremos un control absoluto sobre nuestros gastos, puesto que al consultar nuestra cuenta podremos ver todos nuestros movimientos y será mucho más fácil elaborar nuestro propio plan de gastos.
Si queremos hacer un seguimiento de nuestros gastos, pagar con tarjeta nos facilitará mucho este proceso y como mencionamos en varias ocasiones, el primer paso para poder ahorrar es tener claro nuestro presupuesto personal. Para esto, debemos conocer en qué estamos gastando nuestro dinero.
En Livetopic te ayudamos a controlar tus gastos, te mostramos de forma gráfica tu distribución de gastos anual y tu capacidad de ahorro:
Pero debemos tener cuidado cuando elegimos las tarjetas como medio de pago, ya que la percepción de lo que estamos gastando se distorsiona considerablemente.
Esto se debe a que al pagar con tarjeta no vemos el dinero desaparecer en el momento, por lo que gastar más de la cuenta es mucho más sencillo. Cuando revisemos nuestra cuenta llegará el golpe de realidad y será en este momento en el que lleguen todos nuestros arrepentimientos.
¿Qué pasa cuando utilizamos el efectivo como método de pago?
Sin duda, el pago en efectivo es el método más común a la hora de hacer frente a cualquier gasto que tengamos en nuestro día a día.
A pesar de que cada vez estamos más adaptados al pago con tarjeta, el efectivo sigue siendo el método de pago por excelencia entre la población.
Pagar en efectivo es una forma perfecta de limitar nuestros gastos. Podemos establecer el límite de dinero que queremos gastar y llevar el dinero justo, de esta forma nos aseguramos de no gastar más de la cuenta.
Al pagar en efectivo nuestros gastos se limitan a la cantidad de dinero que llevemos encima, por lo que si eres una persona a la que le cuesta hacer frente a las compras por impulso este método de pago puede ser la clave para controlar estos impulsos.
Sin embargo, el dinero en efectivo puede convertirse en un impedimento para tener el control de nuestras finanzas personales, ya que se vuelve más complicado llevar un correcto registro de nuestros gastos.
Si pagamos todo en efectivo será casi imposible controlar en qué gastamos nuestro dinero. Para poder hacerlo tendríamos que intentar guardar todos los tickets de nuestros gastos diarios.
Entonces… ¿qué método de pago es mejor si quiero ahorrar?
El método de pago que te ayudará a conseguir tus objetivos de ahorro será el que mejor se adapte a tu situación personal.
Dependerá de tu autocontrol y del compromiso que tengas con tus objetivos.
Las tarjetas nos permiten hacer frente a múltiples gastos, pero si te cuesta controlarte cuando vas de compras y siempre acabas gastando más de la cuenta, te recomendamos recurrir al efectivo y llevar solo el dinero justo. Establece la cantidad que quieres gastar y de esta forma conseguirás adaptarte a tu límite.
Si eres capaz de controlar tus impulsos, pero necesitas tener bajo control tus finanzas personales para empezar a establecer nuevos objetivos y reducir gastos no necesarios, las tarjetas serán tu mejor aliado ya que te ayudarán a llevar un registro mucho más exacto y a conocer exactamente en qué gastas tu dinero.
Cada uno de estos métodos de pago tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Si de verdad quieres ahorrar tendrás que ser realista y crítico contigo mismo para poder empezar a cambiar tus hábitos, de esta forma conseguirás alcanzar todos tus objetivos.
En Livetopic te ayudamos a hacerlo. Analizamos tu caso personal para que puedas conocer tu situación financiera personal y te daremos las mejores recomendaciones para que puedas empezar a ahorrar más y mejor.