Cuándo utilizar nuestro fondo de emergencia o saldo de tranquilidad
No podemos saber qué nos deparará el futuro, pero sí podemos prepararnos para cualquier situación inesperada mediante la creación de un fondo de emergencia o saldo de tranquilidad que nos proteja financieramente en un momento dado.
No podemos saber qué nos deparará el futuro, pero sí podemos prepararnos para cualquier situación inesperada mediante la creación de un fondo de emergencia o saldo de tranquilidad que nos proteja financieramente en un momento dado.
Un fondo de emergencia no es simplemente una cuenta de ahorro.
Como su propio nombre indica, es un fondo destinado a ser usado únicamente en caso de emergencia, por eso hoy, queremos explicar en qué situaciones podemos utilizar nuestro fondo de emergencia y cómo contar con uno nos ayudará a conseguir ese bienestar financiero con el que todos soñamos.
Tener claro cuándo debemos utilizar nuestro fondo de emergencia y cuándo no, nos ayudará a aprovechar al máximo nuestros ahorros.
Cuándo no utilizar nuestro fondo de emergencia
El dinero que hemos conseguido reservar en nuestro saldo de tranquilidad debe ser gastado únicamente cuando sea necesario, cuando se trate de una emergencia.
Debemos tener claro en qué no podemos gastar este dinero, así evitaremos caer en la tentación de utilizar nuestro fondo de emergencia en gastos que no son estrictamente necesarios:
Gastos periódicos esperados
Hay gastos poco frecuentes que muchas veces olvidamos incluir en nuestro presupuesto mensual.
Como consecuencia hacer frente a estos se hace complicado, ya que se sale de nuestro plan de gastos habitual, pero no debemos confundirlos con una emergencia.
Para evitar que este tipo de gastos nos pille por sorpresa, siempre debemos intentar incluirlos en nuestro plan de gastos mensual, aunque este tipo de gastos sean anuales, trimestrales o semestrales debemos considerarlos cuando elaboramos nuestro presupuesto.
Te ayudamos a elaborar tu plan de gastos, mostrándote tu distribución de gastos anual:
Te ponemos algunos ejemplos de gastos periódicos esperados que solemos olvidar:
- Regalos en fechas señaladas (cumpleaños u otras fechas señaladas)
- El seguro del coche
- Impuestos sobre la renta
Gastos no esenciales
Una de las preguntas que siempre debemos hacernos antes de utilizar el dinero de nuestro fondo de emergencia es: ¿este gasto es algo esencial para mi?
Si no se trata de un gasto esencial, no corresponde pagarlo con nuestro saldo de tranquilidad, para este tipo de gastos tenemos nuestros ingresos regulares u otros ahorros separados.
Quizás sientas que se trata de un gasto necesario, ya que es algo que ahora mismo necesitas, pero no es esencial para tu día a día, no es una emergencia.
Te recomendamos tener otro tipo de fondos destinados a este tipo de gastos para evitar así utilizar tu saldo de tranquilidad cuando realmente no debes hacerlo.
Para alcanzar objetivos financieros
La creación de un fondo de emergencia es un objetivo financiero en sí mismo, no una fuente de financiación para otro objetivo financiero.
Si gastamos nuestro saldo de tranquilidad en un gasto mayor que nos ayude a alcanzar uno de nuestros objetivos financieros, no tendremos nada para hacer frente a cualquier imprevisto que pueda surgir en un futuro.
Puede que en el momento nos parezca una buena opción destinar estos ahorros a otra partida dentro de nuestra planificación financiera, pero puede que en un futuro llegue a ser un gran error.
Recuerda que no debemos utilizar nuestro saldo de tranquilidad en gastos como el pago inicial de una hipoteca, una jubilación anticipada o la entrada para un nuevo coche. Estos serán objetivos distintos.
Cuando sí utilizar nuestro fondo de emergencia
Si estamos ante una situación inesperada en la que tenemos que hacer frente a gastos vitales, necesitaremos recurrir a nuestro saldo de tranquilidad. Solo recurriremos a él en caso de emergencia o ante gastos inesperados que no podemos abordar de otra forma.
Existen ciertas situaciones en las que sí podremos utilizar nuestro fondo de emergencia:
- Para pagar nuestra hipoteca o alquiler si estamos en una situación de desempleo.
- Para reparar una avería de nuestro coche.
- En caso de enfermedad, para hacer frente a todos los gastos médicos que aparezcan.
- Reparaciones de emergencia en el hogar, o en caso de que se nos avería algún electrodoméstico.
- Cualquier gasto de subsistencia después de una pérdida o reducción del sueldo.
Estos son algunos ejemplos de situaciones para las que se crea un fondo de emergencia. Como ves, todos ellos son gastos totalmente necesarios, relacionados con la vivienda, alimentación, transporte y salud.
¿Qué debemos hacer una vez gastamos nuestro fondo de emergencia?
Si has tenido que utilizar una parte o la totalidad de tu fondo de emergencia, deberás empezar a ahorrar otra vez para conseguir estar nuevamente al nivel de cobertura que tenías antes de la emergencia a la que has tenido que hacer frente.
Revisa de nuevo tu presupuesto e intenta reducir un poco más tus gastos mensuales, de esta forma podrás comenzar a reconstruir tu saldo de tranquilidad de forma más sencilla.
En Livetopic te ayudamos a conocer cuál debería ser tu saldo de tranquilidad, recomendándote una cifra que se adapte a tu situación personal:
Solo tienes que obtener tu Pasaporte Financiero y podrás ver tu plan de gastos mensual, tu capacidad de ahorro y un saldo de tranquilidad recomendado que sería adecuado para ti.