Cómo ahorrar el 50% de tus ingresos
Ahorra el 50% de los ingresos para conseguir un fondo que te ayude a enfrentarte a imprevistos, a saldar deudas o a mejorar tu jubilación. Con una buena planificación, un presupuesto bien diseñado y algo de empeño es posible.
Sí, has leído bien, ahorrar el 50% de tus ingresos. Es un nuevo concepto sobre cómo gestionar el dinero que cada vez se está volviendo más popular.
Ahorrar la mitad de los ingresos puede sonar en un principio como algo radical, pero es una metodología efectiva para destinar ese ahorro a crear un fondo de emergencia, pagar de forma agresiva las deudas o crear un fondo para tu jubilación (si aún no has comenzado a ahorrar o estás acercándote a la jubilación y no cuentas con ese colchón que te permita mantener tu nivel de vida dentro de unos años).
La red de seguridad financiera y flexibilidad que aporta ahorrar el 50% merece la pena. Las personas que siguen este método, a menudo con capaces de pagar su hipoteca en 10-15 años en lugar de 30 años, ahorrar para los estudios universitarios de sus hijos cuando éstos aún son pequeños, comprar vehículos en efectivo, tener una jubilación holgada y disfrutar de la tranquilidad de saber que cuentan con un buen excedente que pueden utilizar para cualquier imprevisto.
Te damos algunos consejos para intentar ahorrar el 50% de tus ingresos (o al menos acercarte a ese objetivo, por ejemplo ahorrando un 30 o 40%).
Cómo ahorrar el 50% de tus ingresos
Vive con un salario
Hoy en día, muchas familias cuentan con dos ingresos. En ese caso, la medida es sencilla: dedicar uno de los salarios al ahorro. Lo más fácil es comenzar adaptando el presupuesto al más elevado. Una vez que hayas conseguido adecuarte a él, puedes probar con el salario inferior.
Este es un hábito con un doble beneficio. Por un lado, conseguimos el propio ahorro; si se reserva, por ejemplo, un sueldo de 1000 € mensuales, al cabo de unos meses, el colchón financiero que se habrá conseguido será importante. Y, por otro lado, si por alguna circunstancia se dejase de percibir uno de los salarios, la nueva situación no supondría un desequilibrio en la economía familiar.
De este modo, no solo dispones de un presupuesto que te permitirá vivir con un solo ingreso, sino que cuentas con un fondo para afrontar cualquier imprevisto alcanzar tus metas financieras.
Aumenta tus ingresos
Obviamente, si se disponen de dos salarios o de uno que sea alto es mucho más asequible ahorrar el 50% que si solo se cuenta con un ingreso familiar y no es muy elevado.
Para aquellos que tienen menos ingresos, la alternativa es aumentar sus ingresos. Esto aumenta rápidamente su capacidad para ahorrar la mitad, ya que pueden destinar cada euro de esos nuevos ingresos adicionales a ahorrar.
Para ello, puedes tratar de conseguir un nuevo trabajo, iniciar tu propio negocio y compaginarlo con tu trabajo actual, o aprovechar tus aficiones para obtener ingresos extra.
Analiza tus grandes gastos
Conseguir ahorrar el 50% también implica ajustar el presupuesto y planificación. Para ello, analiza los gastos a los que dedicas la mayor parte de los ingresos.
Fundamentalmente, todos destinamos la mayor parte de nuestros ingresos a vivienda, alimentación y transporte.
Algunos cambios que puedes considerar en esos tres ámbitos son:
- Una vivienda más pequeña te permitirá ahorrar en gastos de hipoteca o alquiler y también en impuestos municipales y algunas facturas.
- Otra opción es buscar una vivienda algo más asequible y alquilar la propia. De este modo, se pueden afrontar los gastos de la hipoteca y además obtener un beneficio que destinar al ahorro.
- Vivir más cerca del trabajo permite evitar los gastos de transporte.
- También puedes ahorrar en transporte utilizando la bicicleta, si no trabajas muy lejos. O caminando cada día, para además tener un estilo de vida saludable :)
- En comida, las marcas blancas suponen un ahorro interesante.
- Recortar en comidas o cenas fuera de casa es otra forma de ahorrar.
Controla otros gastos
Pequeños gastos pueden llegar a sumar cantidades importantes. Piensa en ellos y analiza cómo recortarlos. Hablamos de suscripciones, de seguros, de suministros como luz o gas, etc. Si dedicas un tiempo a revisarlos, a buscar alternativas y a negociar con las compañías, seguro que consigues rebajarlos de manera significativa.
Puede que al principio el objetivo de ahorrar el 50% de los ingresos no te parezca fácil. Sin embargo, se puede lograr y, además, conseguirás un hábito financiero con el que ahorrar te resultará mucho más sencillo.
El primer paso para intentar ahorrar el 30, el 40 o el 50% de tus ingresos es conocer tu situación actual, capacidad de ahorro y contar con un escenario realista de cómo puedes alcanzar tus objetivos.
Obtén tu pasaporte financiero con un análisis de tus necesidades financieras que te será de ayuda para ahorrar más y mejor, rentabilizar tus ahorros y asegurar tu futuro.
La propuesta es complicada para quien ya tiene obligaciones adquiridas por estar atrapado en una cultura tan consumista como la nuestra.
Pero para esos jóvenes que comienzan su actividad laboral y todavía viven en casa de los padres es perfectamente viable ahorrar ese 30, 40 o 50%.
Una vez adquirida la costumbre, cuando el joven se independice tendrá el ahorro como el primer gasto del mes y si invierte su ahorro correctamente, conseguirá la independencia financiera a los 50 años.