Educación financiera
Consejos para afrontar la cuesta de septiembre
Después de las vacaciones, el relax y los gastos extra llega la temida cuesta de septiembre. Toca hacer cuentas...
Publicado por livetopics
Mar, 11 septiembre 2018, 9:00
Después de las vacaciones, el relax y los gastos extra llega la temida cuesta de septiembre. Toca hacer cuentas, y no solo por lo que se haya podido gastar de más en esas merecidas vacaciones, sino por los gastos que se avecinan: material escolar, ropa de temporada, actividades como la vuelta al gimnasio o las clases de inglés… Y todo sin olvidar que siempre aparece algún gasto del que nos habíamos olvidado. Apretarse el cinturón parece la única salida. Sin embargo, un poco de previsión y cambiar algunos hábitos puede hacer que esa cuesta sea bastante menos empinada. ¿Qué se puede hacer? Vamos a ver algunos consejos de ahorro para conseguir que septiembre sea solo un mes más del calendario.
Cambio de hábitos
Reducir pequeños gastos puede suponer a final de mes un ahorro notable. No se trata de olvidarse de todos los caprichos, pero sí de prescindir de algunas cosas:- Comer en restaurantes y el café a media mañana: si no se puede comer en casa, nada como llevarse la tartera al trabajo. Y lo mismo se puede decir del tentempié de media mañana. De hecho, cada vez está más de moda incluso tener una cafetera eléctrica en la oficina, de forma que cada miembro del equipo un día pone el café, otro el azúcar y entre todos ahorran 2€ diarios en la máquina de café. Saludable y colaborativo :)
- Cuidado con la compra: ir al supermercado con una lista de lo que se necesita evitará caer en “tentaciones” que a la larga salen caras. Aprovechar las marcas blancas y utilizar esos cupones descuento que nos ofrecen también ayuda ahorrar unos euros. Además, a veces comprar online también resulta ventajoso, solo hay que dedicar un tiempo a comparar ofertas.
- La tarjeta de crédito: mejor sacarla de la cartera, se usa con facilidad y a veces olvidamos que lo que se compra a crédito hay que pagarlo. Usarlas sin pensar en ello puede suponer endeudarse más de la cuenta.
Revisar los gastos habituales
Hay gastos que no se pueden evitar, pero siempre se puede conseguir rebajarlos un poco. Septiembre es un mes ideal para revisar los seguros que pagamos y sus coberturas: coche, casa, vida… Y ya que estamos revisando facturas, podemos hacer lo mismo con los suministros básicos, es decir, gas o electricidad, o con el teléfono/Internet. La competencia en el mercado es muy alta, por lo que se puede rebajar bastante el gasto en estos aspectos si comparamos las ofertas de las diferentes compañías. Y dentro de estos consejos de ahorro, no hay que olvidar que hay otro tipo de gastos que son importantes, pero no imprescindibles. Por ejemplo, las suscripciones a canales de pago. ¿Son realmente necesarias? Siempre se puede encontrar otra manera de entretenerse algo menos costosa.Pensar en el mañana
Con los consejos de ahorro que hemos visto tal vez no lleguemos para salvar este septiembre, por ello es esencial ser previsor a partir de ya. Adecuar el gasto a los ingresos es la mejor forma de vivir sin agobios y comenzar a asegurar tu futuro. Este es un muy buen mes para comenzar tu planificación financiera porque estamos pre-dispuestos a reorganizar hábitos de consumo y de vida, de forma que te será más fácil introducir pequeños cambios y comenzar de una vez a gestionar tu futuro financiero. Algo que todos sabemos que no podemos dejar pasar, pero que cuesta dar el primer paso. Puedes comenzar con lo siguiente:- Haz un presupuesto: es básico saber dónde va el dinero. Pueden surgir gastos inesperados, pero disponer de una tabla de gastos corrientes nos ayuda a ver con claridad cómo son nuestras finanzas y, sobre todo, a saber si tenemos buena salud financiera.
- Programa una asignación para gastos: en base a ese presupuesto, una buena manera de ahorrar es proponerse una asignación mensual para los gastos habituales y también para esos pequeños caprichos o necesidades. Y, por supuesto, hay que intentar respetarla.
- Ten un plan de ahorro: sencillo, simplemente basta con desviar una pequeña cantidad cada mes a una cuenta específica. Lo que se conoce como tu Recibo del Ahorro. Si puedes hacerlo de forma automática, mejor. De esta forma, ahorras casi sin enterarte y con el paso del tiempo dispondrás de un fondo para invertir y obtener un rendimiento o para asegurar tu jubilación.